Durante su segundo viaje a Italia, pintó Velázquez importantes retratos, bien conocidos y documentados en la actualidad, por el contrario de su primer periplo italiano tan solo contamos con algunas referencias de los posibles retratos que allí pudiera realizar.

Debemos recordar que Pacheco nos relata cómo Velázquez pintó en Nápoles, antes de su partida hacia España, a  Doña María de Austria reina de Hungría.  Esta obra se ha venido identificando tradicionalmente con la que guarda el Museo del Prado (n0 1187), sin embargo cada vez con más frecuencia los especialistas la están fechando entre 1628-1629, es decir, con anterioridad a que el artista partiera para Italia.

Ante la falta de retratos ejecutados en su primera estancia en Italia, creemos que puede ser interesante comparar el  Retrato de Caballero de la Orden de Santiago  con otras obras, que aunque pintadas ya en Madrid, no se alejan en exceso del año 1630, como son, el  Retrato de Don Diego del Corral y Arellano  (Museo del Prado) (Fig. 8), fechado entre 1631-1632, y el de  Don Pedro de Barberana y Aparregui  (Kimbell Art Museum, Fort Worth, Texas) (Fig. 9), que suele situarse entre 1631-1633. Estos dos últimos dejan ver en su contorno las típicas rectificaciones de Velázquez, que se observan con luz visible, y que tan características son del hacer del pintor. El  Retrato de Caballero de la Orden de Santiago  por el contrario no muestra rectificaciones tan evidentes. Su postura resulta un tanto forzada, con  un  contrapposto exagerado, que resta credibilidad a la figura, alejándola de la naturalidad, realismo, grandeza y monumentalidad que podemos apreciar en las de Madrid y Fort Wort.


 Retratos de Don Diego del Corraly Arellano

Figura 8.- Velázquez, Retratos de Don Diego del Corraly Arellano, Museo del Prado, Madrid.


Don Pedro de Barbena y Aparregui

Figura 9.- Velázquez Don Pedro de Barbena y Aparregui, Kimbell Art Museum, Fort Worth, Texas.

Muy distintas son también las calidades pictóricas de rostros y manos, si comparamos estas obras entre si (Figuras 10, 11, 12, 13, 14 y  15).  La balanza se inclina claramente a favor de los retratos del Prado y del Museo Kimbell, dejando en evidencia al que nos ocupa. A este respecto no podemos pasar por alto el mal estado de conservación de este último, que presenta pérdidas importantes de superficie pictórica, así como múltiples repintes y restauraciones.


Don Diego del Corral Y Arellano, detalle de la cabeza

Figura 10.- Velázquez Don Diego del Corral Y Arellano, detalle de la cabeza, Museo del Prado.


Don Pedro de Barberana  y Aparregui, detalle de la cabeza

Figura 11.- Velázquez Don Pedro de Barberana y Aparregui, detalle de la cabeza, Kimbell Art Museum, fort worth, Texas.


Retrato de un Caballero de la Orden de santiago, detalle de la cabeza

Figura 12.- Retrato de un Caballero de la Orden de santiago, detalle de la cabeza. Colección particular.


Don Diego del Corral y Arellano, detalle de la mano izquierda

Figura 13.- Velásquez, Don Diego del Corral y Arellano, detalle de la mano izquierda, Museo del prado, Madrid



Velásquez, don Pedro de Barberana y Aparregui, detalle de la mano izquierda

Figura 14.- Velásquez, don Pedro de Barberana y Aparregui, detalle de la mano izquierda, Kimbell art Museum. Fort Worth, Texas



Caballero de la Orden de Santiago. Detalle de la mano izquierda

Figura 15.- Caballero de la Orden de Santiago. Detalle de la mano izquierda. Colección particular